Boris recibía ayer otra negativa por parte del speaker de la Cámara Baja, John Bercow, que negaba la posibilidad de votar la deseada aprobación de su plan, si no viene acompañado por el proyecto de ley que incorpore dicho Acuerdo. Bercow entiende que el Prime Minister no puede estar preguntando repetidamente a los parlamentarios la misma pregunta, por lo que cerraba la puerta a la posibilidad de reanudar el debate otra vez, con lo que la cosa queda como estaba, con los diputados que piden tiempo para pronunciarse, en un movimiento que limite las posibilidades de salida desordenada, y con Boris Johnson actuando de esta manera tan rara con cartas que solo firma si está de acuerdo con el contenido, no haciendo lo propio con las que está obligado a enviar.
Se espera eso sí que hoy ya esté listo el proyecto de ley que incorpore el Acuerdo y que se empiece a discutir en el Parlamento, incluyendo la negociación estos días de las posibles enmiendas, alguna de las cuáles constituiría un stopper para Boris Johnson, como la posible enmienda de que Reino Unido siga en la unión aduanera o la de la celebración de un segundo referéndum.
Si estas discusiones se alientan y alargan alimentadas por dichas u otras enmiendas, es probable que nos quedemos sin tiempo y acabe acordándose la extensión del Brexit.
Iván Sáez Fuertes | Associate Partner en EY | PAS – People Advisory Services